24 de mayo de 2022

REY VERSUS CONSTITUCIÓN

Después de leer el comunicado de la Casa Real de S.M. el Rey sobre la reciente visita a España de Juan Carlos de Borbón no tengo más remedio que reafirmarme en que a todos los españoles se nos toma por idiotas. Más que un comunicado de la real casa, parece un reseña de esas que aparecen en las revistas en su sección de Ecos de Sociedad. Solo ha faltado la foto en blanco y negro del grupito ordenadamente colocados para la ocasión. Complicidad y silencio.


Imagen: ctxt

Felipe VI, o no se entera de nada o tiene pavor a la reacción de su papá en el caso de que se le toquen sus reales gónadas. JC sabe mucho y oculta más de todo lo que ha sucedido en España desde que siendo un adolescente puso pie en Madrid para someterse a una esmerada educación basada en los principios fundamentales de la dictadura franquista. 

Como a todos los borbones, España a JC le importa un bledo. Para ellos es una forma de vida, de muy buena vida y nada más. Si las cosas se tuercen les basta con irse del país para seguir viviendo como reyes, al igual que el abuelo de JC que gracias a sus inmensos depósitos de dinero en cuentas extranjeras ni mucho menos se privó de nada.. A JC lo del tema fiscal ya no le preocupa, es residente en Abu Dabi y allí podrá hacer lo que quiera sin temor a que el fisco lo investigue.

El asunto huele a chantaje. O me dejas en paz y sigo haciendo lo que me de la gana con total impunidad, o empiezo a largar y aquí cae hasta el apuntador mientras yo en Abu Dabi me parto de la risa. Hijo mío, yo no tengo nada que perder y además me queda poco tiempo para disfrutar. A España que le den, que al fin y al cabo nuestra dinastía es francesa y si tú estás sentado en un trono es porque yo te lo he regalado al igual que hizo Franco conmigo. 

No pasa nada, dentro de un par de días, como máximo, ya nadie hablará de la visita de JC, tampoco de lo que nos ha costado a todos el inmenso despliegue de seguridad y demás "minucias" que ha supuesto su viaje privado. 

Ahora, dado que la Justicia se ve impotente para juzgarle y que JC se ha desatado, conviene no olvidar que el PSOE y la derecha han vetado las propuestas de la izquierda política para la constitución de una Comisión  que se encargue de investigar al borbón. En este sentido conviene tener muy en cuenta lo que Javier Pérez Royo, Catedrático de Derecho Constitucional en la Universidad de Sevilla, nos decía en su artículo recogido en elDiario,es el pasado dos de marzo:

"...Las Cortes Generales son el único órgano constitucional a través del cual se expresa “La soberanía nacional que reside en el pueblo español” (art. 1.2 CE). El artículo 66.1 es el único artículo que conecta de manera inmediata y directa con el artículo 1.2 de la Constitución"

"...Para las Cortes Generales la inviolabilidad no excluye la investigación de la conducta del rey. La inviolabilidad podría proteger frente a la exigencia de investigación por parte del Poder Judicial, pero no por parte de las Cortes Generales"

"...Las Cortes Generales también pueden, tras dicha investigación, decidir qué reformas de tipo normativo se tendrían que introducir en el ordenamiento para evitar que puedan volver a producirse conductas como las que se habrían estado investigando"

",,,Incluso pueden proponer que se active el procedimiento de revisión de la Constitución, con la finalidad de que quede definida la Monarquía Parlamentaria de manera más precisa. Dado que la revisión constitucional exige la ratificación en referéndum de la decisión adoptada por las Cortes Generales, podría ser una buena ocasión para que, lo que debió hacerse en el momento constituyente originario, se acabe haciendo en este".

Lo que Pérez Royo nos apunta es lo que se haría en cualquier democracia consolidada  Las conclusiones son, a la vista de las pruebas ya conseguidas por la Justicia, bastante previsibles y por tanto permitirían la exigencia de responsabilidades sobre aquellos actos del rey que no hayan sido refrendados. 

Por supuesto, a través de la necesaria Comisión, llegaríamos a conocer con bastante claridad que es lo que ha hecho JC y no solo él, sino también la identidad de los que han "dejado hacer" mirando para otro lado y saber en base a que intereses. 

Además, y después de haber desnudado a JC, según Pérez Royo las Cortes Generales también pueden, tras dicha investigación, y como ya se ha apuntado antes, decidir qué reformas de tipo normativo se tendrían que introducir en el ordenamiento para evitar que puedan volver a producirse conductas como las que se habrían estado investigando. Incluso pueden proponer que se active el procedimiento de revisión de la Constitución, con la finalidad de que quede definida la Monarquía Parlamentaria de manera más precisa. Dado que la revisión constitucional exige la ratificación en referéndum de la decisión adoptada por las Cortes Generales, podría ser una buena ocasión para que, lo que debió hacerse en el momento constituyente originario, se acabe haciendo en este. Sería entonces un muy buen momento para que se convocase un referendum monarquía/republica, pero claro, sin la voluntad del PSOE y la derecha la Comisión es inviable y no digamos ya el referendum citado. Queda claro pues que la única solución es que los partidos de izquierdas obtengan una amplia mayoría parlamentaria...y eso si que depende de los ciudadanos.

Salud y República

Benito Sacaluga



22 de mayo de 2022

ESA ESPAÑA BORBONIZADA

 

Parece lógico que la nobleza y las tropas de cortesanos que rodean a las monarquías sean defensores de esta forma de estado, y es de agradecer que se conformen con una monarquía parlamentaria cuando a ellos lo que les iría bien es que fuera absolutista, por no decir feudal. Lo que es muy difícil de comprender es que los que conforman el pueblo llano prefieran ser súbditos en lugar de ciudadanos. Ya saben ¡Vivan las caenas!



El que fuera rey de España por expreso deseo de un dictador genocida, ha decidido darse una vuelta por aquí después de casi dos años escondiéndose de sus vergüenzas en un refugio dorado, en uno de esos países donde los derechos humanos están prohibidos. Parece ser que viene a España a hacer como que participa en una regata formando parte de la tripulación del velero "Bribón", para después pasar unas horas en Madrid con su real familia, con lo que queda de ella.

Ante esta falta de vergüenza del borbón la derecha política aplaude. El PSOE, siguiendo su tradición accidentalista, se pone de perfil. Los partidos de la izquierda piden unas explicaciones que nadie les dará. Hasta aquí todo normal; lo que ya no debería parecernos normal es que el borbón sea vitoreado masivamente por los habitantes de Sanxenxo entre gritos de !Viva el rey¡, tampoco que las televisiones y demás medios de comunicación dediquen la mayoría de su tiempo y de su papel a esta impúdica exhibición de blanqueo.

Juan Carlos de Borbón ya no es rey de nada ni de nadie, pero sigue siendo borbón y por tanto sus caprichos son ley sin que nada ni nadie ponga coto a sus desmanes, y así lleva desde el 29 de marzo de 1956, día en el que acabó con la vida de su hermano Alfonso pegándole un tiro en la cabeza.

Poco importa que haya cometido varios delitos, puestos de manifiesto en el Informe de la Fiscalia del Tribunal Supremo, nada importa, es más, lo que nos dicen es que tenemos que estarle agradecidos por su labor en pro de la democracia. Una democracia que era imposible de retrasar y por la que se pagó un alto precio, parte de ese precio fue consagrar a JC como rey, sin que los españoles fueran consultados y con un estrepitoso ruido de sables como música de fondo. La monarquía quedó reinstaurada en España 91 años después de que el abuelo de JC se largase al extranjero. Unos meses más tarde, en noviembre de 1931, las Cortes españolas a través de la Comisión de Responsabilidades sentenciaron que:

Las Cortes Constituyentes declaran culpable de alta traición, como fórmula jurídica que resume todos los delitos del acta acusatoria, al que fue rey de España, quien, ejercitando los poderes de su magistratura contra la Constitución del Estado, ha cometido la más criminal violación del orden jurídico del país, y, en su consecuencia, el Tribunal soberano de la nación declara solemnemente fuera de la ley a don Alfonso de Borbón y Habsburgo-Lorena. Privado de la paz jurídica, cualquier ciudadano español podrá aprehender su persona si penetrase en territorio nacional.

Don Alfonso de Borbón será degradado de todas sus dignidades, derechos y títulos, que no podrá ostentar ni dentro ni fuera de España, de los cuales el pueblo español, por boca de sus representantes elegidos para votar las nuevas normas del Estado español, le declara decaído, sin que se pueda reivindicarlos jamás ni para él ni para sus sucesores.

De todos los bienes, derechos y acciones de su propiedad que se encuentren en territorio nacional se incautará, en su beneficio, el Estado, que dispondrá del uso conveniente que deba darles.

Sentencia que fue anulada por el dictador Franco el 15 de diciembre de 1938.

Años después, ya con JC como rey de España, se ponía de moda manifestar que parte del pueblo español no era monárquico, que era "juancarlista" y lo hacían sin saber que JC hacía y deshacía sin recato alguno todo lo necesario para amasar una fortuna desorbitante, la inviolabilidad le protegía y así siguió (y sigue) hasta incluso después de ser obligado a renunciar a la corona y cedérsela a su hijo. 

Lo de JC es una vergüenza para España a nivel internacional, pero no lo es en absoluto para esa cohorte de incondicionales de la que disfruta el borbón, el tiempo y su ignorancia les ha borbonizado hasta el extremo de no querer ver la realidad. Una realidad que, al menos, debería sonrojar a cualquier ciudadano decente, pero claro, los que vitorean al borbón están muy lejos de ser ciudadanos, se han quedado, voluntariamente, en súbditos. 

Dicen que JC, con sus comportamientos, está poniendo en peligro a la monarquía, pues bien, si el actual rey quiere salvaguardarla, o al menos mantenerla viva unos años más, lo tiene muy fácil. Solo tiene que reunirse con el Gobierno y pedir que JC sea desterrado por sus fechorías, y al mismo tiempo solicitar que se lleven a cabo las acciones necesarias para eliminar la inviolabilidad que ampara los actos personales del titular de la corona, algo que se puede hacer sin necesidad de tocar la Constitución. No lo hará.

Salud y República.